Alejandro Valverde y el Movistar Team han sufrido en los Dolomitas y el murciano ha llegado a tres minutos de Esteban Chaves y Steven Kruijswijk a la meta de Corvara, final de la 14ª etapa del Giro de Italia.

Desde el hotel del equipo, Valverde analizaba la jornada en los micrófonos de Onda Cero. “Fue un día duro, impresionante. Nos hemos defendido lo mejor que hemos podido tanto Andrey (Amador) como yo y hay que estar contentos. Ni mucho menos estoy desmotivado”, aseguraba.

Cuarto en la clasificación general, a 3:06 de Kruijswijk, a 2:25 de Nibali y a 1:34 de Chaves, no arroja la toalla. “Hemos tenido un día ni bueno ni malo, regular. Ahí seguimos, queda mucha carrera y hay que seguir animados, aunque es complicado. El Giro da mucha vueltas, está claro que estamos 3 minutos del líder y que tenemos que darlo todo”, afirmaba. Amador se dejaba 3:52 y ahora es quinto, a 3:15.

Valverde no podía seguir el cambio de ritmo de Nibali a 27 kilómetros y sufría un momento malo. “A mí lo que más me ha afectado ha sido la altura, hemos estado siempre en torno a los 2.000 metros y pienso que eso es lo que más me ha marcado y me ha debilitado”, significaba en el programa "Radio Estadio" de Onda Cero. “En ese momento estaba angustiado, no tenía ni fuerzas para responder, luego he cogido mi ritmo. Hemos recuperado bastante y hemos estado a punto de coger a Urán y cerca de Zakarin y Majka”.

De sus rivales, apuntaba que: “Nibali ha sido el que se ha movido todo, pero Chaves y Kruijswijk a día de hoy están mejor que él. Queda mucho Giro y habrá que mover la carrera tanto él como nosotros, y veremos qué pasa”.

Para empezar, mañana tiene en Alpe di Siusi y es optimista: “Es una cronoescalada bastante exigente y pienso que lo haré bien”.

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